Monday, September 27, 2010

Bicentenario y Centenario

Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución Mexicana. Sept. 2010.

Sí, ¡Que viva México!, hace unos días con la “Celebración” rimbómbate, muy pero muy costosa y desde luego muy emotiva, se gritó muy fuerte alucinados con juegos artificiales en la Ciudad de México, las capitales y la mayoría de los municipios del país.
Muchos con miedo de que la delincuencia organizada hiciera una tontería, pues se le anda "jalando la cola al gato" se les olvidó que tiene uñas y ¡además que muerde!, otros con hambre, no, no solo porqué estuvieron haciendo fila para poder estar en la plaza de la constitución durante varias horas, su hambre es cosa rezagada, hambre de justicia social, de trabajo, de escuchar la verdad en los políticos, ya asqueados de mentiras para unificar partidos políticos a fin de lograr conservar el poder unos cuantos. Frenando iniciativas de ley que permitirían lograr una mayor productividad en diferentes ámbitos.
Muchos coreando el “Viva México” desgarrando su garganta, pero iba más allá, parecía más un grito de esperanza, desesperado en la impotencia.
Otros más, disfrutando el largo “puente”, sin pensar más allá, fundiéndose en las tradiciones y costumbres, cual borreguitos bien educados. ¡Claro!, “¿porqué no gastar el gobierno una millonada?, si cuando hacemos la fiesta del pueblo, sea como sea, nos endrogamos pero se hace” aunque cuando ya se termina el recalentado, se tenga que empeñar hasta el alma.
El país tiene muchas cosas que resolver y eso requiere mucho dinero, creo que se deben establecer prioridades, que desde luego el dinero no es del “gobierno”, sino de los mexicanos.
No quiero decir que no haya una Conmemoración un evento de tal importancia merece que se recuerde, pero más allá de la parte de la fiesta, debe reflexionarse sobre los ideales que motivaron a aquellos grandes hombres a construir este gran país y medir la distancia que ahora existe, creo que estamos muy lejos de Celebrar. Por eso digo conmemorar.
Pero también pienso que ya basta de rasgarnos las vestiduras levantando difuntos, viendo demasiado hacia atrás, en lugar de aprender de la historia y ver al futuro. Poniendo mayor entusiasmo para lograr una mejor educación, perdón, pero como no les reditúa en corto plazo, no les interesa, la gran mayoría de los políticos están pensando en sus 3 o máximo 6 años.
Las obras que les gusta “hacer” son las vistosas las populares, las que muchos, no se imaginan cuantos mexicanos “balan”, digo aplauden y ven con buenos ojos, nublándoles la mirada para ver a mediano y largo plazos.